top of page

Un mismo Sol para todos

“Juan y Ahmed desayunan, estornudan, van al cole, juegan, se bañan, duermen… y así una y otra vez, casi como tú. Pero un día Ahmed no pudo hacerlo. Ese día, unos aviones taparon el sol, y el cielo se oscureció tanto que daban ganas de llorar. Ahmed no pudo ir al cole, porque ya no tiene. Tampoco tiene casa. Aun así, Amed se siente afortunado porque nadie de su familia ha muerto. Pero ahora, si no quieren desaparecer debajo de una lágrima negra, se tienen que ir. Así Ahmed se convierte en un refugiado. Y allí comienza un viaje que le llevará por muchos países hasta encontrar uno donde le quieran, porque Ahmed ya no tiene nada. Es uno de los millones de refugiados que hay en el mundo”.

bottom of page